Hoy quiero dedicar
unos minutos a unos angelitos inocentes que encontraron su camino a Dios antes
de su tiempo y a seres humanos cuyo único error fue estar allí en aquel preciso
momento.
Hoy me sobrecojo y se
me hace chiquito el corazón, cuando escucho que alguien decidió acabar con la
vida de personas, adultos y niños, de forma impune, con una facilidad pasmosa,
movido por alguna locura mental que nadie, en ningún momento vio, y si la vio,
la dejó pasar.
Me gustaría sentir
rabia y odio, enfado y cólera, me gustaría maldecir y gritar… pero lo único que
soy capaz es de sentir es dolor, incredulidad y tristeza. No soy capaz de
hablar, porque se me llenan de lágrimas los ojos, me duele el alma y me lleno
de una sola pregunta sin respuestas… ¿por qué?
Ya solo puedo enviar
Luz a los seres queridos que se quedaron en el camino, a esa madre y ese padre
inconsolable, a la familia sin respuestas, al hijo huérfano. Luz a una ciudad
de luto y a un país conmocionado por la tragedia. Luz a un Mundo solidario que
lo siente como suyo y al Universo una petición… Paz, Amor y Respeto del ser humano para el ser
humano.
“Tú
y yo somos uno, tú dolor es mi dolor. Quiéreme como si fueras tú y yo te querré
como si fueras yo”
(Dedicado a las
víctimas del Colegio de E.E.U.U)
©MaryTonda